Me encantaría leer tus poemas y, si me gustan, publicarlos en mi web. Pondré tu nombre y tu correo electrónico y te odiaré un poco si consigues ganar dinero con ello. Si es así, espero que nunca olvides quién te ayudó en tus inicios.
No te enfades si no los publico. Esto de la poesía es muy personal y no todo me cautiva. No es una cuestión de calidad literaria sino de gustos. En este caso, los míos (es mi web). Te adelanto, si te sirve de referencia, que generalmente prefiero lo sencillo a lo demasiado complejo por trabajado que esté. Siempre fui más de Quevedo que de Góngora.
Como no soy mucho de respetar algunos límites, puedes remitirme también textos cortos o relatos (máximo 50 líneas). Ten en cuenta que he dicho ‘algunos límites’ no ‘ninguno’.
Es imprescindible que sea una creación tuya y, por tanto, absolutamente original. No me envíes poesías de otros, por geniales que sean. Yo también sé copiar y pegar (CTRL+C, CTRL+V... ¿ves?).
Si me envías un texto cuyos derechos morales o de explotación pertenecen a otra persona o entidad, no podré publicarlos. Si me la cuelan y lo detectas, puedes enviarme un email y lo eliminaré inmediatamente. Acepta ya mis disculpas por mi triste desconocimiento.
Correo para enviar textos o informar sobre infracción de derechos:
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